martes, 29 de octubre de 2013

Enredo

Hubiera querido detener el tiempo, justo un segundo antes de acabarse
todo, pero fue imposible, lo pensé un segundo después.
Hubiera querido cambiar de vida, y sacarle provecho a esa locura que
siempre tuvo razón.
Hubiera querido regalarle a mi decepción ese último abrazo, y aflojar
muy despacio el nudo que tanto apretó.
Hubiera querido compartir con más de dos, los tejados de mi casa,
haber desgarrado mi garganta.
Hubiera querido despistar a la eternidad que me visita cada invierno,
a recordarme que mi tiempo pasa.
Hubiera querido comprar la felicidad a mi vecino, para lucir una sonrisa
de vez en cuando.
Hubiera querido amar amando, más allá de lo que dicen estas dos palabras,
reservarme tu espalda para las noches en desvelo.
Hubiera querido despertar sin miedo en otra ciudad, y regalarle cinco
sentidos más a mi vida
Hubiera querido despedir a las despedidas, y no tener que decir adiós
nunca de nuevo.
Hubiera querido siempre, pagar por lo que debo, despertar en las mil
mil y una noches de aquel cuento.
Hubiera querido liberar a mi vida, de tanto enredo.